Estos insectos dan pie a la realización de festivales culturales y eventos turísticos, que son oportunidad para promover su preservación.
Cada verano, distintas regiones de México celebran la llegada de la temporada de luciérnagas, un fenómeno natural que combina turismo, actividades culturales y esfuerzos de conservación.
Desde junio y hasta agosto, tanto autoridades como prestadores de servicios turísticos y comunidades locales organizan festivales, recorridos nocturnos y campañas de sensibilización para proteger a esta especie y atraer a miles de visitantes.
Entre los destinos más representativos se encuentran los bosques de Nanacamilpa y Calpulalpan, en Tlaxcala, donde se espera la llegada de más de 110 mil personas para presenciar el espectáculo.
La Secretaría de Turismo del Gobierno de México informó en sus redes sociales que este estado será reconocido por la UNESCO como la octava guía de turismo comunitario en el país, con el objetivo de beneficiar directamente a las comunidades anfitrionas.

En el Estado de México, la temporada también es pretexto para realizar distintas actividades.
La Secretaría de Cultura y Turismo promueve el Festival Internacional de las Luciérnagas en municipios como Amecameca, Ayapango, Chalco, Ecatzingo, Ixtapaluca, Tepetlaoxtoc, Texcoco y Tlalmanalco.
Más de 30 ecoparques distribuidos en zonas como el Valle de los Volcanes, Tepotzotlán y Jiquipilco abren sus puertas para el avistamiento nocturno.
El avistamiento de luciérnagas no solo tiene un valor turístico, sino que también representa una oportunidad para promover la educación ambiental.
Las luciérnagas producen luz propia mediante el fenómeno de bioluminiscencia, lo que les permite comunicarse entre sí.
Además, pertenecen a la familia de los escarabajos y son especialmente sensibles a la contaminación lumínica.
Para disfrutar de esta experiencia sin afectar el entorno, se recomienda que al llegar a cualquiera sitio de avistamiento, usar ropa oscura, impermeable y calzado antiderrapante, así como evitar prendas fluorescentes o reflectantes.
Las actividades suelen realizarse por la noche y en silencio, para no alterar el hábitat de estas especies.
La temporada 2025 de luciérnagas se extenderá del 20 de junio hasta el 10 de agosto, aunque días previos ya se contemplan carteleras.
Aunque Tlaxcala y el Estado de México concentran buena parte de la actividad turística, otras regiones del país también celebran este fenómeno, fortaleciendo así el turismo de naturaleza y el respeto por la biodiversidad..
Redacción AN / KC
